El Real Madrid aseguró el liderato de la Liga Endesa a falta de cuatro partidos para el final de la temporada regular tras derrotar al Baskonia (101-89) en el encuentro aplazado de la jornada 29. El premio permite al conjunto de Laso asegurarse el factor cancha hasta la final y ganar margen de maniobra de cara a la Final Four de Belgrado (del 18 al 20 de mayo). Por cuarta vez en lo que va de curso, los blancos rebasaron la frontera de los 100 puntos —con seis jugadores por encima de los 10 puntos y siete con dobles dígitos de valoración—, con Rudy Fernández al frente (16 puntos, 4 rebotes, 6 asistencias, 5 recuperaciones y 28 de valoración) para anular el meritorio partido de Luca Vildoza (22 puntos). Luca Vildoza consiguió su mejor registro desde que llegó a la escuadra baskonista con 22 puntos, 4 asistencias y 29 de valoración.
La baja de Doncic, por molestias en un pie, y la ausencia de Randle, que cedió su ficha de extracomunitario a Ayón, permitieron el estreno como titular de Melwin Pantzar. El canterano sueco de 18 años y 1,90m, que trabajó en pretemporada con el primer equipo y ejerció de sparring de Llull en el tramo final de su recuperación, fue la principal atracción de un partido destemplado, como el Palacio (5.781 espectadores). Un duelo grande rebajado por la holgura del Madrid en el liderato y por el contexto de entreguerras, pero cargado de calidad. Con Causeur y Rudy marcando el paso de los blancos desde el inicio; con Vildoza y Poirier discutiendo el dominio por el cuadro vitoriano (25-24, m. 10).
Un pulso con trazas de final anticipada y reminiscencias de la última pelea por el título por el duelo Laso-Martínez en los banquillos. Un cartel clásico. Sin Campazzo ni Granger en las salas de máquinas, pero con Vildoza presumiendo de pujanza y Llull produciendo como si nada hubiera pasado. Los primeros puntos del menorquín (10 en los seis minutos que estuvo en pista en la primera mitad) sirvieron al Madrid para construir un parcial de 21-6 entre el minuto 11 y el 16 con el que el líder marcó territorio. Casi al tran-tran, el marcador pasó del 25-26 al 46-32 y, aunque el Baskonia logró rebajar ligeramente el impulso local antes del paso por los vestuarios (52-44), la inercia quedó establecida para la reanudación.
La motivación de Causeur ante su exequipo y la intensidad innegociable de Felipe permitieron de nuevo a los de Laso estirar el marcador ante un Baskonia saturado mentalmente y más laxo de lo habitual en lo físico tras vaciarse en el playoff de la Euroliga ante el Fenerbahçe. Con el 12º punto del capitán madridista la renta local subió a los 15 (67-52), pero el martilleo brioso y constante de Vildoza. Con 10 puntos consecutivos del base argentino al inicio del último cuarto, el Baskonia encontró la fe extraviada para discutir la victoria al líder (79-72, m. 34). Pero también afinó Thompkins en ese tramo y regresaron Llull y Rudy para sellar el primer puesto del Madrid en la liga regular, una costumbre en la era Laso.
El País