Enrique Lancelloti, entrenador de Central Argentino de Ceres en Liga Argentina, converso de diversas cuestiones con Basquetboleando. La nota completa a continuación. Entrevista.
El entrenador de CAO de Ceres, a casi 10 años en la institución deportiva de la provincia, hizo un parate en sus estudios, preparación y actividades como entrenador y docente, más un tiempo dedicado a la familia, se tomo un tiempo para dialogar con Basquetboleando. No solo cuestiones de la temporada de su equipo sino que también varias cuestiones que rodean al básquet. La entrevista y video a continuación:
-¿Cómo venís llevando este receso obligado y lo que fue el corte abrupto de la temporada?
-EL: “La verdad que como todo entrenador. Al principio, después de venir con temporadas muy largas y extenuantes, ya que además de dirigir el equipo de Liga también estoy a cargo de las categorías formativas. Es decir, en los tiempos que no hay Liga, estoy abocado a la local. Entonces, el receso al comienzo me vino bien para descansar, disfrutar de mi familia. Tengo dos hijos que están estudiando en la universidad, en su primer año, pero se vinieron para acá y compartimos tiempo los cuatro juntos.
Pero, como a todos, este tiempo ya se nos empieza a ser muy largo. Igualmente, uno lo aprovecha para estudiar, para mejorar sus planificaciones, para hacer cursos y ver videos. Es un estar constante con nuestra actividad.
A su vez, es un buen tiempo para rever cosas que antes no las podía hacer por la temporada”.
-¿Cómo viviste ese tiempo de incertidumbre de no saber si continuaba o terminaba la temporada?
-EL: “Uno siendo docente tenía una anticipación de lo que se venía. Así, que ni bien se definió que no se jugaba el partido que teníamos frente a Salta Bakstet, que venía de una gira. Creo que debían de enfrentar a Tiro Federal y venían hacia Ceres, pero no alcanzaron a llegar al partido ante Tiro porque se suspendió el torneo. Entonces, al día siguiente, sábado a la mañana juntamos el plantel y le explicamos la situación; les dijimos que se vayan a sus casas por una semana y que los íbamos a mantener informados de cómo se iba desarrollando la realidad.
Ahora, les estamos mandando cosas a los jugadores, para que las hagan en sus casas o departamentos.
La verdad fue que nos sorprendió a todos, la cantidad de tiempo del parate y lo que viene aún, del futuro incierto”.
-A nivel personal, ¿Qué objetivo te planteabas antes del inicio de temporada?
-EL: “Hay condicionantes que son inevitables. Desde que estoy en Ceres, que se cumplen 10 años, siempre seguimos trabajando con la base. A esa base le movimos o incorporamos algunas piezas para mejorar. Siempre fuimos creciendo y ascendiendo.
Más allá, que el básquet pueda tener bastantes cambios es un deporte lógico.
Cuando tenés una base bien armada y vas subiendo. Nosotros arrancamos con los torneos locales, federativo, Torneo Federal, Liga Argentina. Pero de golpe y porrazo, por no poder soportar el aspecto económico porque somos un equipo chico desde la faz económica, estábamos hasta lo último definiendo de si jugábamos o no la Liga Argentina.
Jugadores y mi persona nos potenciamos mucho por la temporada anterior, surgieron un montón de propuestas, economías muy por arriba de la medida de Ceres. Entonces, creímos que era el momento en que los jugadores debían volar y adquirir otras experiencias. A eso se sumó la baja de algunos chicos de nuestro club, es decir que prácticamente perdimos todo el equipo.
Tuvimos que arrancar de nuevo, no pudimos mantener a nadie e incluso algunos jugadores se fueron al Federal; por bastante más plata que le podíamos brindar nosotros en el torneo. La verdad que uno lo entiende porque es profesional más allá de que nos duela.
Desde ahí, tratamos de construir un equipo para que pueda competir en mitad de tabla, con muchos jugadores a ojo para tratar de recuperarlos. Como el caso, de Rodrigo Haag, quién venía con muchas lesiones, de no poder completar una temporada. Tiene unas condiciones terribles pero las lesiones complicaron mucho su juego. Pero tuvo tres lesiones en la temporada y cuando jugo cinco o seis partidos, estuvo al cien por cien. Además, tuvimos de a tres jugadores lesionados, algo que nunca me había pasado.
Así y todo el equipo fue largando promesas, Maretto (Adriano), con 20 años, terminó con 30 minutos de promedio, 11.7 puntos por partido, 12 puntos de valoración. También surgen Peralta y Rossi, siendo el primer año que toma tanto protagonismo.
Hay cosas positivas. Aunque hubiésemos querido más resultados positivos. Se nos escaparon partidos en el final, producto de que teníamos un equipo muy corto. También, a causa de la inexperiencia porque teníamos muchos jugadores del Federal.
Tanto yo como los dirigentes teníamos claro cuál era el objetivo y hacía donde fuimos.
Todo fue muy comprensible y la verdad que el equipo cuando estuvo entero ganó partidos importantes”.
-¿Viste una conferencia muy pareja?
-EL: “Muchos de los equipos que se armaban con grandes nombres como Barrio Parque y San Isidro, estuvieron lejos de las expectativas.
Si miras la parte de arriba de la tabla, tanto Villa San Martín como Norte de Armstrong y Unión no tenían grandes platillas, sin embargo, con mucha gente joven y con mucha rotación, más buen juego, se fueron manteniendo arriba.
El que siempre estuvo en su nivel por el equipo que tenía fue Oberá, ganó el Súper4. Así y todo había arrancado mal la temporada. Cambia de entrenador, llega Leo Iriarte.
Es complicado el torneo nuestro. Pero me dio la sensación de que estábamos bastantes parejos y con lo que restaba de temporada podía pasar cualquier cosa…”
La entrevista completa en el siguiente enlace (del minuto 49´ a la 1h 26´ 16´´)